Entérate qué hacer y cómo actuar en caso de caídas y resbalones en el trabajo
A diario, en los lugares de trabajo ocurren cerca de 25.000 casos de caídas a nivel mundial. Según la OSHA (Administración de Salud y Seguridad Ocupacional) los costos de estos accidentes laborales superan los $60 mil millones cada año.
Por lo general, un accidente laboral de caída o resbalón es producido por pisos húmedos, terrenos accidentados, escalones defectuosos, baldosas o alfombras rotas y demás. Algunas veces el empleador es indirectamente culpable del accidente laboral, sin embargo, esto no siempre es así.
¿Te caíste o resbalaste en el trabajo? En algunos casos, se pueden presentar reclamos por accidente laboral para obtener compensación y en otros, sólo puedes aprovechar tu seguro médico laboral y tener más cuidado la próxima vez.
Desde la industria pesada hasta el trabajo administrativo
Sin duda alguna, el lugar de trabajo no es importante cuando de caídas y resbalones se trata. Se trata de los accidentes laborales más presentados en las pequeñas, medianas y grandes empresas. Y es que, por pequeña que sea una oficina, ningún trabajador está exento de sufrir una caída o un resbalón.
Posibles consecuencias de un resbalón o una caída en el trabajo
Las consecuencias de un accidente laboral podrían variar de acuerdo a las condiciones, los contratos, la situación en la ocurrió el accidente y demás. Sin embargo, en términos generales es posible que no puedas regresar al trabajo de inmediato.
En algunos casos más graves, podrías no volver a hacer el trabajo que hacías antes del accidente. Las implicaciones económicas de no trabajar a corto o largo plazo pueden lograr que tus ingresos se vean afectados.
Además, es posible que tenga facturas médicas o de atención como resultado de la lesión. La rehabilitación después de una lesión por resbalón y caída puede llevar algún tiempo incluso si te has recuperado por completo.
Un punto importante que debes recordar si tiene un accidente por resbalón o una caída es que las lesiones pueden ser difíciles de identificar de inmediato. Son fáciles de pasar por alto y pueden surgir más tarde. Los dolores y molestias pueden parecer insignificantes al principio, pero podrían enmascarar lesiones mayores a largo plazo.
Qué hacer en caso de caídas y resbalones en el trabajo
Si no sabes qué hacer tras una caída o resbalón en el trabajo, sigue leyendo y entérate de cuáles son los pasos a seguir para gestionar de forma inteligente este accidente laboral.
- Lo primero: ocúpate de tus lesiones
Esto es lo más importante que debes hacer si tras el accidente, sufriste una lesión como consecuencia. Haz una evaluación rápida de tus lesiones y pídele a un compañero de trabajo que obtenga un botiquín de primeros auxilios si es necesario o llame a una ambulancia si tus lesiones son demasiado graves para ser tratadas por una persona no especializada.
Independientemente de cuán leves sean tus lesiones en el momento del accidente de resbalón y caída, no cometas el error de pasarlas por alto. A veces, los síntomas se manifiestan después de uno o dos días y si no se recibe el tratamiento oportuno, una lesión menor podría convertirse en algo más grave. Exige evaluación profesional por un médico, sin importar cuán leves puedan parecer tus lesiones.
- Informa sobre el accidente
Es importante informar al gerente o supervisor sobre el accidente de resbalón y caída en el trabajo. Debes asegurarte de que estén al tanto sobre lo ocurrido en el accidente en caso de que necesites reclamar una indemnización en una fecha posterior. En este momento, no puedes culpar a nadie por el accidente. Sólo estarías informando lo que sucedió.
- Toma fotografías de la escena del accidente
Con la evidencia fotográfica que respalda tu reclamo, no tienes que preocuparte de que la gerencia discuta que el accidente haya ocurrido de una forma diferente o de eludir su responsabilidad de cómo o por qué sucedió.
Las fotografías brindan un fuerte apoyo a un reclamo por caída o resbalón en el trabajo y lo protegen de una situación de “tu palabra contra la de ellos”. Aún mejor si puedes tomar un video que muestre la causa de su accidente y las áreas circundantes.
También puedes tomar fotografías de tus lesiones. Si no puedes hacerlo por ti mismo, pídele a otro colega que obtenga fotografías de tus lesiones.
- Asegúrate de que tus colegas sepan sobre tu accidente
Si alguno de tus compañeros de trabajo presenció la caída en el accidente laboral, pregúntales si pueden proporcionar declaraciones como testigos en caso de ser necesario para respaldar el reclamo. Aunque algunos pueden tener miedo de presentarse por temor a las repercusiones, la mayoría de los trabajadores obedecerán, sabiendo que muy bien podría haber sido uno de ellos el accidentado.
- Mantén un registro de lesiones, síntomas y tratamientos médicos
Aunque es seguro que el médico tratante haya llevado un registro de tus síntomas y tratamientos, siempre es una buena idea que por ti mismo tengas registros. Esto te ayudará si tu médico pasa por alto un síntoma menor, que luego se convierte en una condición de debilitamiento a largo plazo. Tus registros personales ayudarán a establecer la conexión entre tus lesiones y tus síntomas diferidos.
- Mantén un registro de tus gastos relacionados con el accidente
Los gastos pueden comenzar a acumularse muy rápido después de un accidente. Además de cualquier gasto médico, también debes llevar un registro del costo de viajar de ida y vuelta para cualquier tratamiento, el costo de cualquier tipo de ayudas para la movilidad o el costo de contratar atención domiciliaria si es necesario.
Si ganas el reclamo, se le podría reembolsar todos estos gastos, pero así mismo, podría ocasionar la pérdida de ingresos en el trabajo.
- De ser necesario, contacta a un abogado de lesiones personales
Un abogado podría ser su mejor aliado si sufres de lesiones en un accidente de resbalón y caída en el trabajo. Sin duda alguna, los abogados que son especialistas en reclamos por accidentes de trabajo tienen un conocimiento profundo en esta área de la ley.